Un fandango, de alguien a quien le fascina el flamenco y que el azar ha puesto en mi camino...
"No pienso escucharte más
que lo tenemos tó hablao.
¿Pa qué volver a picar
si el tajo está rematao
y no quea mineral...?"
¡Gracias, Roberto!, por el rato de charla tan interesante que me has brindado, dedicándome parte de tu tiempo. Y gracias también por seguir mi blog.
2 comentarios:
Mujer, magia y arte se dan de la mano en la pintura de la chiquita piconera de Julio Romero, que has elegido para resaltar esa profunda y sencilla filosofía popular que expresa el fandango... ¡Enhorabuena! Depues de mi último poema a Granada y el Darro, intentaré pasear por esa Córdoba sultana llenándome de la luz que emana de ese puente romano y torre de Calahorra, que se muestra en la pintura como huyendo por la tangente.
Un abrazo.
Antonio
Un abrazo, Antonio. Me alegra de que estemos en contacto al menos de este modo. Bello tu poema a Granada y el Darro.
Seguiremos en contacto y gracias por leer.
Inma
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